¿Qué significa “contra todo riesgo” en el contrato?

Las aseguradoras ofrecen diferentes niveles de cobertura que tienen que ver directamente con el costo de la póliza y con la respuesta que habrán de dar en relación con los incidentes que se tengan o dentro de los que se esté inmerso. Así en esta clasificación de propuestas y de su alcance se encuentran grandes títulos como pueden ser “Seguro de Responsabilidad Civil”, “Seguro contra Terceros” o “Seguro contra todo riesgo” que orientan más o menos sobre la apuesta que se ofrece pero que, dependiendo de la entidad que provea la póliza puede variar en gran medida su alcance.

En este caso me voy a centrar en el significado que aporta que el seguro sea “contra todo riesgo” pero queda abierta la posibilidad para que consultes, en ocasión de que te queden dudas, sobre la propuesta que ofrecen los otros dos tipos de cobertura.

 

 

En la cima del ranking

La Cobertura contra todo riesgo es la más alta que podés encontrar en cualquier aseguradora. Siempre tiene una base y diferentes propuestas que se adaptan a las necesidades de los clientes o sus preferencias.

El objetivo que se quiere cumplir al momento de ofrecer este tipo de cobertura es que se respalde lo más posible el patrimonio y que se repongan en su mayoría las pérdidas que pudieran ocurrir así no se pierde el valor por el que el auto fue asegurado.

Es importante destacar que no todos los autos pueden tener una cobertura contra todo riesgo. En general tiene que tener una antigüedad que ronde entre los 5 y los 7 años pero siempre hay excepciones así que no dejes de consultar si no se encuentra tu vehículo dentro de este rango.

El valor del seguro contra todo riesgo es más alto que los que se encuentran en las otras categorías y se obtendrá del resultante de los niveles de cobertura, del valor del auto, del ámbito de radicación del vehículo y de las características del conductor del mismo.

Principales valores del Seguro Contra Todo Riesgo

Que en el contrato con tu aseguradora diga “contra todo riesgo” implica, por ejemplo, que en el caso de que tengas un auto cero kilómetro, la aseguradora se hará cargo de todos los incidentes que tengas al cien por ciento durante los primeros dos años.

Es una cuota de gran tranquilidad transitar sabiendo que se tendrá el respaldo necesario para que la inversión hecha en el cero kilómetro haya valido la pena. Así, si pasás por el mal incidente que implica que te roben tu auto, tendrás siempre la tranquilidad de que durante esos dos años recibirás un auto nuevo en compensación.

No solo el auto en sí mismo y en su totalidad estará cubierto dentro de una póliza contra todo riesgo sino que también quedan dentro del plan los daños que pudieran ocurrirle por fenómenos naturales (según los hayas pactado en el contrato),  la rotura de cristales, la ruptura de cerraduras y también pérdida o daño de las llantas.

¡Un “todo riesgo” con todas las letras!

Para que te quede bien claro cuál es el alcance de esta cobertura es bueno un ejemplo de los que suelen suceder en la calle y es el caso de que te choque un auto que se da a la fuga o que no tiene seguro en su vehículo. Todos los daños que por una ocasión como esta o semejante te pudieran ocurrir quedarán solventados por tu propio seguro. Lo mismo si tuvieras un mal paso y te chocaras con alguna pared o rompieras por descuido alguna parte de tu auto.

Algunas aseguradoras incluyen dentro de su nivel de cobertura más alto otros servicios como son el auxilio mecánico, ampliación automática para países limítrofes, reposición de la unidad mientras se encuentra en reparación y otros detalles que bien podés coordinar y acordar si los considerás necesarios, en el momento de cerrar las cláusulas de cobertura.

Que figure “contra todo riesgo” en el contrato te tiene que dar la tranquilidad de que tanto tu auto como la inversión que has hecho en él se mantendrán intactos por más tiempo.

¿Tenés un seguro contra todo riesgo? ¿Te sentís más protegido al conducir?

[Tweet “”Principales valores del Seguro Contra Todo Riesgo.””]