Cuando buscamos el seguro ideal para nuestro automóvil, sobre todo si es nuestro primer seguro de autos, nos preguntamos cuál de todas las coberturas que nos ofrece el mercado será la mejor para nuestro caso particular.
– Queremos que nuestra póliza nos resguarde si hay desastres naturales y daña o devasta nuestro vehículo; queremos estar cubiertos en el caso de que nos roben y/o arruinen o destruyan el auto; y ¡claro! – Queremos sentirnos cómodos sabiendo que si se nos incendia el automotor, tenemos un seguro contra incendio que nos garantice que nos abonarán por lo que se ha destruido por el paso del fuego.
¿Qué puede provocar que nuestro vehículo se cubra en llamas?
Cuando un auto se incendia, pocas veces puede identificarse la causa, aunque generalmente son las mismas:
Motor: En él hay elementos que pueden superar los 100ºC con facilidad. Por eso, una fuga de combustible o de aceite que se derrame sobre alguno de estos elementos podría provocar un incendio. La causa más habitual es la fuga de aceite. Si el líquido cae sobre una superficie que esté muy caliente, hay muchas probabilidades de que se origine un incendio.
Sistema de Escape: Alcanza una temperatura tan elevada -suele superar los 200ºC- que, si entra en contacto con algún tipo de elemento que arda con facilidad -hojas secas, papel-, podría originar un incendio. Cuando el escape o los frenos están muy calientes, se puede producir un incendio en caso de que detengamos el vehículo sobre un cúmulo de hierba seca. La hierba arde con mucha rapidez.
Sistema eléctrico: El paso de la corriente eléctrica por los cables tiende a elevar su temperatura. Una instalación defectuosa de un algún aparato -como una alarma, una radio, etc., podría hacer que se incendie con facilidad. En cualquier caso, el fallo eléctrico es una causa de incendio muy poco habitual, y se produce por un sobrecalentamiento de algún sistema eléctrico.
Para cualquiera de los casos, un seguro contra incendio es la mejor alternativa. Nos ofrece la tranquilidad de que, en caso de incendio, podremos recuperar las pérdidas.
¿Qué cubre el seguro de incendios?
Los seguros contra incendio cubren todos aquellos elementos/partes del vehículo que vienen incluidos desde su fabricación, es decir: ruedas, volantes, motor, etc.
Según las cláusulas específicas de cada aseguradora, esas piezas se abonarán como si fueran nuevas o en un 70% u 80%, por ejemplo, en el caso de las ruedas, si se toma en cuenta el desgaste de las mismas.
Luego tenemos aquellos elementos que instalamos los propietarios, extras a los que vienen incluidos desde fábrica. Por ejemplo, una radio estéreo que no viene con el vehículo. En este caso el seguro de incendio no cubrirá absolutamente un centavo sobre ello, salvo que hayamos contratado dicha modalidad y hayamos detallado cada elemento agregado, en las condiciones particulares de nuestra póliza, esto es, que tipo de accesorio es y su precio.
Muy diferente es si se incendia todo el coche. Respecto de ello, cada compañía tiene su propio estatuto de cobertura. El incendio total del vehículo supone la pérdida total.
Lo habitual es que los seguros de incendio nos indemnicen a valor a nuevo si el automóvil tiene menos de 1 o 2 años de antigüedad, aunque hay aseguradoras que nos pagan el valor de venta desde el primer día.
Así que al momento de contratar un seguro contra incendios debemos leer y consultar bien sobre las cláusulas incluidas: qué nos cubre y qué se exceptúa.
Seguro de incendio: precio
Los precios de estas coberturas no son elevados en lo absoluto, dada la poca probabilidad de que un auto se incendie.
Lo recomendable es contratar esta modalidad cuando el automóvil es nuevo o tiene pocos años de antigüedad. Lo mismo, si son frecuentes los actos vandálicos en el sitio donde se vive y se aparca el coche, como los tan nombrados actualmente: los quemacoches.
Ahora que ya tienes información sobre los seguros contra incendios ¿con que empresa vas a asegurar tu vehículo?