Los accidentes de tránsito en general y de autos en particular ocurren de manera continua y muchas veces ocasionados por acciones que podrían modificarse muy fácilmente. Tiene que ver con la verdadera toma de conciencia de lo que implica que uno se encuentre al volante de un vehículo y de cuán peligroso es ese gran objeto que estamos maniobrando.
Si realmente se considerara con seriedad el lugar que se está ocupando al volante las estadísticas serían otras y muchas vidas se salvarían.
¿Querés realmente disminuir la posibilidad de tener accidentes mientras conducís? ¡Podés hacerlo!
Acá te comparto algunas claves indispensables para poner en práctica.
Análisis de la manera en que conducís
El análisis de lo que uno hace al volante es imprescindible para llegar al cambio porque solo cuando se toma conciencia de los errores es cuando se puede llegar a una alternativa favorable.
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El respeto por la velocidad
Constantemente los carteles que nos rodean en las rutas y calles nos indican cuál es la velocidad que se debe tomar en la conducción. No son límites para ser alcanzados al pie de la letra ni mucho menos para traspasar. Es importante recordar que la capacidad de reacción con el auto disminuye cuando se llega a velocidades extremas o muy altas. Como contrapartida, se tiene mucho más control del auto cuando la velocidad puede ser modificada rápidamente o cuando se tiene que frenar ante un imprevisto y se necesita respuesta rápida.
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Conducción siempre en el mismo carril
Trasladarse con el auto hacia un destino dista mucho de lo que es una carrera. Es por ello que no se tienen que tomar las calles o autopistas como espacios en los que se debe demostrar poder o autoridad. Siempre te encontrarás con conductores que quieren sobrepasarte o apremiarte con velocidades no permitidas. En esos casos tenés que mantener la calma y la seguridad de que el trayecto que estás recorriendo es perfecto con la decisión que velocidad que has tomado. Cambiarse de carril innecesariamente puede ser causa de un accidente tanto para vos como para muchos otros conductores que tomen seriamente su desplazamiento vehicular.
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Las dos manos al volante
Tengas o no tengas tanto control del auto, los imprevistos no elijen experiencia en la conducción. Es por ello que siempre es recomendable tener las dos manos al volante porque se tiene mucha más seguridad en el momento de que se tiene que hacer alguna maniobra.
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Distancia entre autos
Independientemente de la velocidad con la que se esté avanzando es importante mantener distancia entre los autos porque es la única manera en que se puede absorber sin peligro alguna detección rápida que ocurra.
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Avisá cómo vas a moverte
Con al menos dos segundos de anticipación siempre hay que avisar la maniobra que se está por hacer, incluso cuando se cree que no hay autos cerca. Es una manera de tomarse el hábito y de mandar señales para que no se tomen por sorpresa las acciones en el tránsito.
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Mirar para todos los ángulos
Es común, sobre todo cuando se avanza con tranquilidad, dejar los ojos en reposo en el auto que va adelante pero lo importante es siempre mantener la vista en movimiento, tomando contacto con diferentes frentes. Para ello, el uso de los espejos laterales y el retrovisor son indispensables.
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Uso del cinturón de seguridad
No es una opción sino una obligación utilizar siempre el cinturón de seguridad. Hay probadas investigaciones que dan cuenta de cómo se salva la vida cuando se está ajustado al asiento del auto a través del cinturón.
Hay otras cuestiones que también te ayudarán a disminuir las probabilidades de tener accidentes. Andá poniendo en práctica las que te cuento en este post y en los próximos te comparto más rutinas que te salvarán la vida.
¿Sos cuidadoso con tu conducción? ¿Qué medidas de estas ya has estado adoptando?