La circulación en rotondas muchas veces genera dudas; no siempre tenemos en claro quién tiene prioridad, si el que entra o el que sale; a veces tampoco está muy claro cómo debemos circular dentro de ellas, etc.
En este post de 123seguro, queremos darte algunos consejos que te van a servir y te van a ayudar a circular seguro, siempre
Si bien la ley de tránsito es muy clara, existe desconocimiento por parte de muchos conductores en cuanto a las prioridades de paso y otras reglas que deben tenerse en cuenta para circular seguro en las cercanías y dentro de una rotonda.
En la Ley Nacional de Tránsito se establece que cuando se trata de giros y rotondas, tenés que observar las reglas que mencionaremos a continuación:
- Usar luces de giro para advertir a los conductores que circulan cerca de tu vehículo sobre la maniobra que estás por hacer. Procurá ofrecer la advertencia con suficiente antelación.
- 30 metros antes de salir de la rotonda, circulá por el lado sobre el que girarás. Esto evitará que pegues volantazos para salir y con ello podrás circular seguro, disminuyendo posibilidades de colisión con otros vehículos.
- Cuando estés próximo a la salida de la rotonda (o a su entrada, más aún) reducí la velocidad de manera paulatina.
- En el artículo 43 de la Ley de Tránsito, se nos indica: “Reforzar con la señal manual cuando el giro se realice para ingresar en una vía de poca importancia o en un predio frentista”.
Es de suma importancia que la circulación en rotondas (es decir, dentro o alrededor de ellas), sea ininterrumpida y sin detenciones. En cuanto a la prioridad de paso, la tiene aquél que circule por la rotonda. Quien desee ingresar a una rotonda, deberá ceder el paso a quien egresa de la misma, salvo señalización en contrario.
Cabe destacar y dejar en claro que cuando de rotondas se trata, pierde la prioridad de paso quien circula por la derecha. Con ello se pretende que el tránsito no se trabe dentro de la rotonda.
Quizás te preguntes cuál es la utilidad de las rotondas, es decir ¿para qué han sido creadas? Resulta que la configuración geométrica de las tan mencionadas rotondas, permite que circule una mayor cantidad de vehículos en un mayor número de direcciones y en un mismo período de tiempo. Aunque no lo creas (porque muchas veces nos parece un espacio de tránsito peligroso), reduce la cantidad de accidentes potenciales entre vehículos. Por otro lado, permite limitar la velocidad de circulación, lo cual conlleva a que los accidentes que sucedan, sean de menor gravedad.
La circulación en rotondas no siempre es fácil, pero tener en claro las normas para manejar en ellas, es una excelente manera de circular seguro.
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