Es cosa sabida y comprobada que la ingesta de alcohol antes de conducir puede provocar grandes accidentes y muchos de ellos fatales. El peligro no solo está presente para la persona que conduce alcoholizada y sus acompañantes sino también para todo el resto de los vehículos que se encuentren en el mismo momento en la calle transitando alrededor.
Es por ello que si bien el control y la conducta tendría que estar en cada uno, desde las autoridades de los municipios o regiones, también se tiene que programar cierto cuidado, sobre todo para proteger a todos los que sí deciden conducir responsablemente o los simples transeúntes que no tienen por qué sufrir lesiones a causa de conductores descuidados.
De esta manera se organizan los controles de alcoholemia que no tienen que considerarse un hostigamiento sino un perfecto cuidado de la población.
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Sobre el alcohol al momento de conducir
El 50% de los accidentes ocasionados por autos tienen un origen en alguna imprudencia vinculada con el alcohol. Mucho de ello tiene que ver con la falta de conciencia y de conocimiento de lo que provoca esta bebida en el organismo.
- Falsas sensaciones
Quienes beben alcohol se sienten de pronto mejor y creen que cuentan con la lucidez necesaria para enfrentarse al control que un vehículo requiere. Sin embargo, esa fuerza que sienten tener disminuye rápidamente y los umbrales de la reacción se limitan automáticamente. Al no poder pensar correctamente se toman riesgos innecesarios y el cuerpo tampoco responde tan rápidamente a las órdenes que desde el cerebro se le dan, así puede no poder ejecutarse un cambio a tiempo y mucho menos el freno.
- Visión de túnel
El alcohol opera de manera directa sobre la visión. En un primer momento el conductor puede llegar a sentir que ve con claridad pero de un momento a otro puede producirse lo que se denomina “visión de túnel” que lleva a que se oscurezca todo de golpe y aunque dure tan solo segundos, pueden constituir instancias fatales.
- Falta de reacción
El alcohol en la sangre prolonga el tiempo de reacción del conductor. En condiciones normales quitar el pie del acelerador y posicionarlo sobre el freno puede llevar 0,75 segundos mientras que bajo el efecto del alcohol esta misma acción puede llevar 2 segundos o más, tiempo insuficiente cuando se conduce, por ejemplo, a 100km por hora y se tienen autos adelante.
Datos para pensar
Con un porcentaje de 0,5 de alcohol en sangre ya se puede observar una modificación observable en los reflejos y en el comportamiento y el riesgo normal que conlleva la conducción se multiplica por dos.
Con 0,7 de alcohol en sangre las anomalías se ven agravadas y ya el riesgo sube a 5 veces más de lo normal.
Con 0,8 de alcohol en sangre la dificultad se hace aún mayor porque el riesgo aumenta a 10 veces más que lo que puede ocasionarse en una conducción sin ingesta de alcohol.
1,2 de alcohol en sangre ya determina el inicio de la ebriedad y el riesgo se dispara a 35 veces más en el momento de la conducción y cuando el nivel de alcohol en sangre alcanza el 2 por cierto, el riesgo mortal de accidentes arriba al 80 respecto del nivel normal de conducción.
Límites en el control de la alcoholemia
Como mencionábamos anteriormente, pese a todos los alertas y la información que intenta difundirse, la bebida sigue presente en muchos de los conductores. Es por ello que organismos nacionales, provinciales y municipales organizan campañas de control.
Los límites para la ingesta del alcohol al conducir son:
1) Para quienes conduzcan automóviles o similares, 0,500 gr./lt. de alcohol en sangre (0,400 en la Provincia de Córdoba).
2) Para conductores de motocicletas o ciclomotores, 0,200 gr./lt. de alcohol en sangre.
3) Para transportistas de carga o pasajeros, 0,000gr./lt. de alcohol en sangre.
Si te enfrentás a un control de alcoholemia y contás con un nivel mayor de alcohol en sangre a los expuestos anteriormente no podrás seguir conduciendo, te retirarán el vehículo y tu licencia de conducir con la consecuente quita de puntos e impuesto a pagar, dependiendo de la localidad o provincia en la que te encuentres. Lo mejor, en estos casos, es tomar conciencia del error ya que, por otra parte, te estarán salvando la vida. En caso de que ofrezcas resistencia tené en cuenta que también cuentan con la facultad para llevarte detenido.
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